martes, 1 de diciembre de 2009

Revista nº 5 -CLUB DE POETAS DEL SUDESTE CORDOBÉS

SARA
(Homenaje al geriátrico Azulado)

Todos tenemos un don....
ella uno muy especial
el de amar a los ancianos
y saberlos cuidar.

Esta alegres para ellos
nunca se sintio quejar,
con solo tocar sus manos
conoce cual es su mal.

Manos rugosas y frias
que tanto supieron dar,
con pasos arrastrados
es muy lento el caminar.

Con mucha paciencia
los ayuda en su andar
no necesito nombrarla
es ELLA. y su amor para dar..

Norma Ereza - Monte Buey


**************************

ESPEJISMO

Mansedumbre de las noches mías
efluvio vital de la demencia
enérgico proceso en la ventura
decidida voluntad a la escritura,

Ronda la noche su potura
veo un amplio espectro circulando
como un duende verbal en libadura
acrecienta el matiz en la mistura.

Es anónimo andar en la elocuencia
son sus voces audaces en vehemencia
extasis de amor en frecuencia.

Espejismo indesante que modula
ansiedades y gozos cual eclipse
que se apuna en mi mano y desvanece.

Gladis Pasquini- San Genaro-Sta Fe
Editado en la antologia: “De Baigorria con Amor 2006”

*******************

EN EL MAR DORADO

Mientras imagino navegar
en un inmenso mar de oro,
rodeado de cristales
y paneles destellantes;
me detuve a pensar
que millares de pepitas doradas,
están pasando bajo mis pies
en este preciso instante.

No es el metal precioso,
que enciende la guerra
y derrama la sangre.
Es el rubio y preciado trigo,
“el oro de nuestra pampa”.
Es al que cada día
lo encuentras en tu mesa,
en forma de rico pan
o finas exquisiteces.

Ha venido desde lejos,
cruzando mares y océanos;
te han traído hombres nobles,
entre penas y sueños.
Llenos de afán y esperanzas,
en el surco te arrojaron,
y un nuevo tapiz fue cubriendo
las tierras de nuestra patria.

No fue el sol de Mayo
del viejo continente,
el que doró las espigas
con tu preciado tesoro.
Ha sido el de Noviembre
de la América soñada,
y entre bullicios y alegría
la cosecha comenzaba

Niños y mujeres
bajo el sol abrasante,
recogían las gavillas
que los hombres dejaban.

Como toro embravecido
la caldera resoplaba,
y una columna de humo
rumbo al cielo se marchaba.
Mientras los cofres violentados
al hornillo alimentaba;
el oro de nuestra tierra
en costales se guardaba.

Pero que inmensa alegría
fue la de aquellos hombres,
al saber que esos frutos
que con esfuerzo lograron,
partían a su querencia
en bodegas colmadas,
para saciar el hambre
de la Europa arrasada.

¿Quién se ha de acordar
que cuando Diciembre llegaba,
una estruendosa fiesta
a la campiña alegraba?
Apenas una persona,
hoy va devastando el campo;
mientras el monstruo moderno”
avanza en el “mar dorado”.
Sin importarle siquiera,
el pasado lleno de gloria,
de nuestros antepasados.

Sergio Bravi-Cruz Alta
Editada en la Antologia: “De Baigorria con amor 2007”

*****************************

EL CÍRCULO PERFECTO

El círculo, es la figura geométrica perfecta,
No tiene principio ni fin…
Nuestras vidas, se asemeja a una rueda,
Que gira y gira, sin detenerse,
Pero…tiene un principio y un fin…
Desde el momento de la concepción
Estamos vivos…
Vemos la luz…
Hacemos nuestras vidas…
Rodamos como esa rueda…
Muchas veces quedamos atrapados
En ese camino, que ya esta delineado…
Pero…no nos conformamos…
Nos desviamos…para alcanzar
Rápidamente lo que anhelamos…
Y no nos damos cuenta que en ese atasco
Hay un aprendizaje, un mensaje…
Entonces ya es tarde…
Detengámonos, reflexionemos, aprendamos…
La rueda no se detiene, sigue girando…
Y LLEGARA EL MOMENTO
En que se detenga…
Y nada podremos hacer…
Porque ese circulo que creímos perfecto…
Rompió las reglas geométricas,
Se convirtió en otra figura
Con un vértice y se corto…
Por eso vivamos…como podemos
Pero…no nos conformemos
Luchemos…las metas se alcanzan…
Los sueños, pueden hacerse realidad…
Somos lo que queremos ser…
Nuestro cuerpo, responde a los impulsos
De nuestros pensamientos…
Pensa que sos un rey…
Y obtendrás un castillo…
Pensa que sos un mendigo…
Y obtendrás miserias…
Pensa en positivo…
Y serás FELIZ….

Eva Grabemvarter -Ordoñez-Cba


***************


LA PIEL DE LA SERPIENTE


La serpiente me sedujo, y comí
- del árbol de la ciencia del Bien y del Mal -
Génesis

I

Soy la piel exánime que despide la serpiente.
Ella se arrastra sigilosa entre la arena,
sólo su huella reconozco
marcada a fuego como un zigzagueante rayo.
Como el último vestigio de tormenta.

Yo soy el pelecho gastado y transparente.
Sólo una cuota más que se cobra el olvido.



II

Busqué la piel de la serpiente debajo de la piedra
y fue un puñal de obsidiana el que me atravesó el pecho
abierto y palpitante sobre el altar del templo.
Busqué el mensaje escrito en las escamas
y este había sido borrado por el tiempo.



No me resigné al ardiente desafío del desierto
con sus alucinaciones y sus espejismos.
No me resigné a la sed, a pesar de su acecho.
A pesar de que sus ojos me miraban.
A pesar que dejó su pelecho a merced del viento.


Mordí el veneno oculto en la manzana
y fue como morder la piel de la serpiente
con ella caí al fondo de cada precipicio donde habita la soledad.
Busqué la gota de agua en el vértice ignoto de la piedra
pero la secó con su piel, con su árido manto de escamas
hasta morir de sed.

III

La serpiente conserva su piel intacta, brillante y tenebrosa.
Esmeralda en el desierto, avanza indiferente.
A su paso las arenas se abren como un cuenco.
Alas de arena surcan la tarde.
Alas de arena que se pierden en el mágico embrujo del silencio.


La serpiente conserva su piel intacta.
Ella ,la inevitable.
Ella, la condenada.
Ella, la que esconde la escritura de Dios sobre su cuerpo.
Ella, la de los insondables laberintos
siembra de vanos espejismos el desierto.

Leonor Mauvecin- Córdoba
Editada en el libro: “La piel de la serpiente”


*******************************

EL CIRCULO DORADO

En el medio del círculo, está concentrada la belleza; todos los caminos convergen en él, aunque son muy distintos . El gato, buscará el más sinuoso y escondido, escudriñará pacientemente antes de arrojarse, si es blanco, casi probablemente, tendrá la desventaja de su sordera. El pobre, ostentará siempre, los rastros de las riñas de la noche....
El benteveo, en la caña más alta, estará horas enteras, dejando oir su canto monótono, cansado, aunque en el círculo dorado, esté el más sabroso bocado. La mariposa, bajará suavemente, con el vaivén que a sus alas livianas, le impone el viento. El círculo dorado, será su ardiente tumba. Entre barros húmedos, la avispa busca afanosamente, el oscuro túnel en que guardó a esa araña que será el alimento de sus crías, liviana, inquieta, termina su trabajo, lejos del círculo dorado, Eso, la salva.

Los pies humanos, van sin cuidado, directa y apresuradamente,
hacia ese círculo que para él, brilla con la atracción de una esbelta mujer, o una enorme pila de dinero, o un futuro de placentera vida, y desaforado, pone sus pies inquietos en ese círculo que ardiente, y repulsivo, quema y deshace, la única herramienta, que le servía para vivir, la sabiduría.....

Elsa Molina Solis -Rosario -Sta Fe

******************


HOMENAJE A NALO
(La primera flor en la tierra una invitación
a la canción no nacida) Rabindranath Tagore


Dos veces ve su ojo en telas y Jesús
la mano firme el pulso exacto
y todo un corazón que ha amado tanto
aún con desengaños,predica en la luz.

Vuelve el rostro y su perfil añora
delicadezas al alba y mil matices
rayándole a la noche cicatrices...
por su suave trazar... la luna llora.

Y el sol...que digo sol...diez mil estrellas
en su magín desfilan y se internan,
el rostro se alza y sus pies intentan
tom ar con manos calidas y bellas

todas las que le faltan a la tierra.
Nombro la tierra ese agua que se quiebra
como la lagrima que asoma de la tela
desde el mirar que mira y nos eleva.

Lleva en su nombre la historia un estandarte
los ojos de la luz, Naló...Ada del Arte.

Favio Ceballos-Granadero Baigorria-Sta Fe

********************************************************

LA PIEZA

Tenía nueve años y el coraje infinito que sólo da la falta de vivencias en la vida.
Es por eso que, haciendo caso omiso a los rumores que había mamado desde mi nacimiento relacionados con “la pieza”, estuve varios días agazapada estudiando todos los movimientos de la casa para poder descifrar quién tenía la llave de entrada a la misma y dónde estaba escondida.
En ella vivían mis abuelos. Desde siempre perteneció a la familia, y por conversaciones que se interrumpían drásticamente cuando llegaba o me aproximaba, había llegado a la conclusión de que algo pasaba relacionado con la misma, pero nadie me lo quería decir.
Además cada vez que inútilmente quería entrar en ella, los gritos de quien estaba más cerca coartaba mi impulso, recibiendo además una larga y bien estudiada reprimenda.
Entonces, cansada de tanto misterio, resolví develarlo personalmente.
Me fue difícil encontrar el escondite de la famosa y bien cuidada llave, pero lo logré por un descuido verbal de mi querida y recordada abuela Teresa, quien nunca supo de su indiscreción.
Ese día estuve demasiado nerviosa, a tal punto que las horas, otrora lerdas y monótonas, pasaban cual vuelo de águilas.
Y la noche llegó, y con ella los preparativos minuciosamente programados.
Me puse el pijama, saludé a todos y me acosté. Debajo de la almohada ya tenía la linterna.
Esperé ansiosa a que todos se acostaran. Mi corazón parecía un caballo desbocado corriendo por un prado. Tal eran los sonidos que producía y repercutían en mi adrenalina que circulaba a muchas revoluciones por segundos. Lo sentía latir en mi garganta y en mis sienes.
Cuando comprobé que todos dormían me levanté sigilosa y fui hasta la cocina a buscar la llave que estaba escondida detrás de un ladrillo flojo de la marlera donde mi abuela almacenaba el indispensable combustible para su estufa a leña.
Ya los latidos repercutían como bombos en mi cabeza, y al poner la llave muy despacito en la cerradura comenzó a erizarse mi espinilla haciéndome sentir una sensación que iba del calor al frío; del quedarme al huir.
Pero me quedé… y entré.
Todo era de una oscuridad absoluta. Prendí tímidamente la linterna y…¡me petrifiqué!...
Cerca de la ventana que daba al patio trasero, había una pequeña mesa, y detrás de ella, entre un humo verde que flotaba en casi toda la habitación estaba sentado un espectro con un turbante negro, en esa penumbra que sólo permitía que se notara su contorno por la iluminación que producían las velas que despedían un claro olor a incienso.
Comencé a desandar el camino recorrido calculando el lugar de la puerta que estaba a mis espaldas, con el sólo objeto de salir corriendo.
La figura se levantaba despacio, con una mano extendida hacia mí, que ya hasta había perdido la noción de quién era, y en su avance, con una voz ronca y gutural decía cosas ininteligibles, suplicando que fuera a su encuentro, aunque me parecía que lo único que quería era atraparme y llevarme con ella.
Cada vez estaba más cerca. Me parecía sentir su respiración caliente y putrefacta danzando sobre mi cara.
Mi mano, volcada hacia atrás, tomó el picaporte que, negándose a que lo pudiera abrir quemó intensa y profundamente mi piel.
Ya desmayaba. El terror producía un dolor tan intenso en mi pecho que creí que un infarto terminaría con mi corta vida.
De pronto sentí que me sacudían bruscamente. Abrí los ojos cargados de terror y ahí, sobre mí, encontré la cara dulce y hermosa de mi abuela.
Di un salto en la cama y la abracé tan fuerte que mi ímpetu desmedido le produjo mucha risa. Había venido a invitarme a desayunar, así que solamente calcé mis chinelas y fui tras ella dando gracias de haber despertado de ese terrible sueño.
Ya sentada, y mientras servía su siempre exquisito café, refunfuñó diciendo como todas las veces….¿a ver cómo están de limpias las manos?... las levanté rápida para mostrárselas, porque el aroma de ese brebaje me atrapaba, pero escuché que me decía…¿qué te pasó?...¿te quemaste?
Mientras la garganta se me cerraba nuevamente de susto miré mis manos y ahí, justo ahí, en la palma de una de ellas y como grabado a fuego estaba la marca irrefutable e inexplicable del picaporte de “la pieza”.

Zaidena- Elortondo-Sante Fe

**********************************


DETRÁS DE MI ADIÓS

añadiendo restos de mí
rosa y no abrasa almohadas

cuando a espaldas obscena por un balcón
cae la luna a la mitad luz boca arriba

y el cristal se rompe en la finitud de la fisura
y los juramentos detrás de mi adiós

pagana o religiosa mira al cielo o las estrellas
enciende una fogarata y celebra el atisbo de mañana.

Orlando Valdez-Rosario

**********************************

Los textos de los mensajes escritos por celular, pueden suprimirse pero no desaparecen, porque son energía, y ya sabemos que la energía se puede transformar, pero como el sol, aunque no la veamos, siempre está . . .

Réquiem por los mensajes de texto

¿Dónde irán esos mensajes
que borran, tras recibirlos?
¿Flotarán en el espacio
en un círculo infinito?
¿O se esfumarán acaso
como . . .“desaparecidos”?
Con tarjeta o facturado
su costo al ser tan “ínfimo,
lo usan y hasta lo abusan,
los novios y los amigos.
¿Qué sería de la “trampa”
sin estos mudos testigos?
¡Vaya si lo han de saber
los amantes clandestinos!
Esos sí que hay que borrarlos
porque conllevan peligro,
¡si lo sabrá más de uno
que por fiarse, así le ha ido!
Y aquellos que no contestan
lo que les hemos escrito . . .
¿No duelen como un saludo
que no es correspondido?

Sobrevolando algún “celu”
a veces los imagino,
expulsados, sin pantalla
tristes, sin un rumbo fijo.
Pobres mensajes de texto
que eliminados han sido
¿habrá cielo para aquellos
que mueren tras ser leídos?
¿No vendrán a reclamarnos
por ese triste destino?
Tal vez un día cualquiera,
esos textos, redivivos,
nos encuentren pesarosos
por haberlos destruido.
Con el “chip” desactivado
y el pulgar tieso, inactivo,
y los ojos añorando
todo aquel palabrerío.
Ahí sí que se vengarían
por haber sido excluidos
esos textos que, “por las dudas”
en el acto suprimimos . . .

Delsio Evar Gamboa
Laborde – Cba


**********************


CARLOS FUENTEALBA

Por fidelidad al pulso milenario de la justicia
abrimos los ventanales de la verdad
para que no apesten complicidades
para no extraviarnos en atorrantes olvidos.
Está cerca la desfigurada pizarra del Neuquén
vuelve a ser reciente la desolación multiplicada
el desgarro que voceó el país.
Canallas ocultos tras carátulas de poder
ese invento del vacío
empuñaron las órdenes
para desenhebrar marchas y letras,
lumbres, hombros y caminos,
escribientes fortunas de dignidad
con sus cerrojos impunes
y triunfantes atropellos de ruina.
Entre malezas de vergüenza
los tiradores agujerearon mañanas,
escuelas y versos.
El mapa de la educación estaba insurrecto
y los adormecedores de siempre
trizaron la osamenta de ser uno
aridando con el puñetazo del descuido
al caudal valiente
que no deja de arbolar
las aulas de los tiempos.
Enlutaron la blancura,
esa aldaba que entre la noble gente
llama a enristrarse de lucha
para atravesar astilladas realidades
sacudir la resignación
y reconocer que el absurdo del hambre
pronuncia enfermedad
y termina degollando a la mejor caligrafía,
esa copla gloriosa del pensar.
Implacable disparo por la espalda
al Maestro Fuentealba
nos vuelve a encielar de sangre la historia
hendida de cobardes muecas.
Deshojaron la verde luz de su tañido
que arrebataba a puro rumbo y refugio
a quienes leían su química de vocación y razón
los arrebataba del sinsentido que lo fusiló.

Nora Bruccoleri.-Mendoza

************************************+


RECREACIÓN PRIMAVERAL

Se acerca la primavera,
y en ese cambio estridente
suele haber un emergente
al que tu espíritu espera;
es la flor que reverbera
coqueteando con sus formas,
y en tu corazón conformas
versos y aromas mezclados,
en ambientes mixturados
donde tus sueños transformas.

Renovado despertar,
testigo de nuestros bríos,
aleja dejos sombríos;
comienza con su aletear,
la golondrina a volar,
con rodeos misteriosos,
en arabescos virtuosos,
que uno quiere interpretar
y en el cielo recrear
mil ensueños venturosos.

Bienestar primaveral,
expansión que el ser espera,
recreación de una hoguera
que arde con fuego genial.
Movimiento sideral,
renovación instintiva,
y una nueva perspectiva
que despierta la emoción
para inspirar la canción
que en el alma se motiva …

Inés Elena Goyenechea-
Tema publicado en la Liturgia Cotidiana del mes de Septiembre del 2009-Edit. San Pablo-

****************

ALGUN DÍA


Cuando llegue el ocaso a nuestra vida
Te envolveré en pasadas primaveras
Los besos se volverán golondrinas
Y los brazos serán hiedras junto a tu torso prendidas.

La belleza será surcos marcados en tus mejillas
Por el arado del tiempo que fue sembrando sonrisas
y en el marrón de tus ojos florecerán las semillas
Que dieron color y aromas a las horas compartidas.

La frescura de tus labios beberán sorbos de brisa
Y tu negra cabellera se cubrirá de cenizas
El corazón seguirá marchando sin mucha prisa
Con pereza en el andar y con la sangre encendida.

Dulces serán los recuerdos de tantas cosas vividas
Y hondas las locas huellas del dolor de ciertos días
Cuando el ocaso se acerque, con nuestras manos unidas
Caminaremos al cielo sin verdades ni mentiras.

Con el alma envuelta en tules
Silenciosa, adormecida
Aún sedientos de amor
Despediremos la vida.

Maria Isabel Clausen- Gral Roca -Córdoba

*******************************

ANCLADO RECLAMO


“son más tristes los muelles cuando
atracan”
Pablo Neruda


La casa madera y hojalata cimbrea
su cíclope ventana
desgarra cortinas

jirones vuelan trepan naufragan
sobre remolinos de arena

zozobran olas contra los muelles
espumas de pañuelos atracan
-infinita veces-

tejen redes secretas
-de otras vidas-

emergen esperanzas de sueños primitivos
-breves mensajeras-

amanece el dolor de los siglos
-sobre océanos de hombres-
sin voces sin palabras sin silencios

se despierta la casa
delicioso aroma salino
-inmóvil silenciosa complacida resignada-

como anclada a la espera
reclama agobiado dolor

¿en qué ola sin nombre navega este poema?


Alicia Balista
Buenos Aires – Argentina





*********************************************



SOY


“Dios dijo: Ama a tu prójimo, como a ti mismo.
En mi país el que ama a su prójimo se juega la vida.”
GIOCONDA BELLI -Nicaragua

Soy mi Dios.
El que decide los tiempos de mi lengua.
Tiempos de bonanza. Tiempos de sequía.
El que permite mi preñez de oveja negra.
El que ve más allá de los silencios.
El que rompe los breteles de la silueta ingrávida.
El que todo lo puedes cuando no puedes nada.
El que enciende, implacable, los cirios de la aurora.
El que da vuelta el rostro cuando tu miedo implora.
El que corta cabezas.
Sandías que quedan recostadas a la vera del sueño.
El que tira cenizas donde duerme la lluvia.
El que corta la mano y el anillo.
El que lo engarza en un muñón de jade.
El que patea el último perro, en su última noche de agonía.
El que copula con la extranjera muerte.
Y la besa y la ensalza y la vuelve ventisca.
El que tira el tarot con los santos evangelios.
El que sabe que soy bruja, prostituta y madre bendecida.
El que deletrea los signos de mi nombre.

Soy mi Dios. Mi único Díos...y mi único Demonio.

Amelia Arrallano-San Luis

***********************

QUEJAS A JOHANN JAKOB


A J. J. Bachofen, iniciador de los estudios sobre el matriarcado

Ya no hay esa Luna que inspiró el poliamor.
Ni una Afrodita terrenal para el quejica-cuenta-penas
que te invocara y temiera porque ella fue su único placer
y aún lo sagrado; así fue en Licia y Creta;
ya no hay comunalidad con un marco telúrico
por alma de la Tierra; ¿dónde está, Das Mutterecht?
su mano fuerte que declara el Sí, sus diez brazos
que destrozan el No, dónde, Bachofen?

La Gran Vagina y la Mujer curvada de Nut
ya no es paraíso, ni sus senos echan leche
sobre la boca del mundo, ¿dónde en Egipto
la hallaré, dónde en Asia central, Johann Jakob?
... si ya no hay esa Luna que inspiró el poliamor
y Démeter ha sucumbido bajo pantanos
de basura cultural; el último Dionisos
se metió en la discoteca de los descreídos
y el sol sale de noche entre asesinos
y mujeres tatuadas de desposesión.

La modernidad dejó caspucias, Bachofen.
Sobrajas ensagrentadas por espadas.
Se llevó el Tellus de Sumeria y Egipto.
Toda moralidad, todo decoro, asociado
a la maternidad y la ginecocracia.
Nada hay con derecho arcaico
de Madre, la tierra ha sido
desmadrada.


Carlos Lopez Dzur -California

No hay comentarios:

Publicar un comentario